(26)Comunidad

Han pasado 23 años desde que el sociólogo polaco Zygmunt Bauman publicara Community: Seeking Safety in an Insecure World (2001), un exhaustivo análisis respecto de la idea de “comunidad”.  Hoy, en medio de una época marcada por la incertidumbre global, volver a leer este notable libro parece una tarea necesaria y urgente. Para Bauman, vivimos en un mundo donde las estructuras tradicionales de seguridad —familias estables, Estados fuertes, relaciones duraderas— se han debilitado frente a la dinámica cambiante de la globalización, los mercados financieros y las migraciones. Ante esta volatilidad, el deseo de comunidad aparece como un intento de recuperar una sensación de pertenencia, estabilidad y protección. Bauman advierte, sin embargo, que esta búsqueda se ha vuelto una tarea cada vez más compleja. Si bien anhelamos comunidades que nos ofrezcan identidad y resguardo, al mismo tiempo sentimos temor ante las restricciones que estas puedan imponer sobre nuestra libertad individual. Esta tensión —entre la necesidad de vínculos estables y el impulso de mantener nuestra autonomía— define las contradicciones de la vida contemporánea. 

Bauman señala que muchas de las comunidades actuales no son formaciones duraderas sino construcciones transitorias, a menudo impulsadas por intereses de mercado o por afinidades momentáneas. La globalización, que prometía acercar culturas y personas, ha generado también exclusiones, segmentaciones y nuevos tipos de sesgos. Las redes sociales, por ejemplo, permiten conexiones instantáneas pero muchas veces superficiales, reforzando burbujas identitarias en lugar de construir comunidades sólidas. 

En este contexto, Community: Seeking Safety in an Insecure World nos invita a repensar la comunidad no como un refugio nostálgico que nos hace mirar el pasado, tampoco como una reacción cerrada frente a los cambios del presente, sino como una construcción consciente que reconozca la diversidad, fomente la solidaridad y acepte la apertura. La verdadera comunidad, sugiere Bauman, será aquella capaz de sostener la diferencia y, a la vez, construir vínculos de cuidado mutuo en medio de una incertidumbre cada vez mayor. El análisis de Bauman resulta especialmente interesante en contextos como el latinoamericano, donde la globalización ha coexistido con fuertes desigualdades sociales y nuevas formas de fragmentación. Para el autor, el tejido comunitario sigue siendo no solo un deseo humano sino una necesidad estratégica para construir sociedades más resilientes. La pregunta que surge a continuación es ¿cómo podemos reconstruir la confianza colectiva en un mundo definido por la incertidumbre y un incipiente proteccionismo?